El alcalde de Hartford, Luke Bronin, anunció el jueves que espera invertir 5 millones de dólares en cuatro años, para desarrollar un nuevo equipo de profesionales de respuesta a crisis, que se encargaría de ciertas llamadas al 911, en lugar de o además de los agentes de policía.
Bronin describió el plan en un artículo de opinión en el Hartford Courant, diciendo que trabajaría con el Concejo Municipal de Hartford, para crear un equipo civil de respuesta a la crisis, que se ocuparía de situaciones de enfermedad mental, angustia emocional, trauma y adicción.
El anuncio es consecuencia de la creación por parte del consejo Municipal, de una nueva Junta de Revisión de la Responsabilidad de la Policía, encargada de hacer recomendaciones de mejoras y reformas al Departamento de Policía de Hartford, y de una propuesta del consejo municipal, de redirigir un millón de dólares extra del presupuesto policial del próximo año, para pagar a los empleados de Obras Públicas, los programas extraescolares y los inspectores de salud y vivienda.
Otro millón de dólares se reasignará dentro del departamento de policía al centro de detención y a la unidad de estupefacientes, para pagar las patrullas policiales en la comunidad, la capacitación en competencias culturales, la desescalada y la resolución de conflictos, y un equipo permanente sobre violencia doméstica.
Bronin ha dicho que aprueba esos cambios. El concejo municipal votará el presupuesto final el lunes.
También ha prometido proponer cambios en la Junta de Revisión de la Policía Civil, un grupo creado hace 28 años para revisar las investigaciones independientes de las denuncias contra los agentes de policía.
Quienes critican a los organismos modernos de aplicación de la ley, afirman que los agentes de policía son con demasiada frecuencia los primeros en responder a cuestiones que podrían ser tratadas por los trabajadores sociales y los trabajadores de la salud. Al sustituir algunos policías por profesionales capacitados pero desarmados, se podría evitar una cierta violencia contra los negros y los morenos, dicen.
Ese fue uno de los argumentos que utilizaron los miembros del Concejo Municipal, Joshua Michtom y Wildaliz Bermúdez, del Working Families Party, en su fallido intento de redirigir el 22% del presupuesto de la policía para el próximo año, a otros servicios de la ciudad. La mayoría Demócrata del Concejo, votó por una reducción del 3,5% en el año en curso.
Cuando el alcalde y el jefe de policía se opusieron a la supresión de la financiación del departamento policial, diciendo que la policía basada en la comunidad sería lo primero en desaparecer, Michtom argumentó: “No quiero interpretar esto, pero parece que el alcalde dice que la única forma en que Hartford merece recibir servicios básicos es de personas con armas”.
Este jueves, Bronin dijo que su iniciativa debería recibir 500.000 dólares este año, 1 millón el próximo año, 1,5 millones el tercer año y 2 millones el cuarto año.
Bronin dijo que estudiaría modelos posibles para el programa, como la Crisis Assistance Helping Out On The Streets (Asistencia en Crisis Ayudando en las Calles), de Eugene, Oregon e iniciativas recientemente anunciadas en San Francisco y Albuquerque, Nuevo México.