Tía Julia, Quiero desearle aunque con atraso un Feliz Dia de la Madre y que se cuide con esto del virus corona que ha echado a perder las fiestas de ese sagrado día en que se nos festejaba a nosotras, se celebraban las graduaciones de los estudiantes que terminaron el año escolar 2019-2020 pero que ahora están encerrados en sus casas y pegados a las computadoras y los celulares; y la oportunidad de aprovecharnos de las primavera que se ha hecho ahora más larga que una fila para entrar al supermercado. Pero no me estoy quejando.
Sin embargo, tía, la prefiero así extendida por algunas semanas más porque no quiero pensal como será cuando llegue el calol y tengamos que pagar los viles de la electricidad que nos va a chupar el aire acondicionado.
Con Lelo hemos notado en el parque Elizabeth que ha aumentado el número y la variedad los pajaritos y ahora hay algunos de colores que no conocíamos y que quizás se habían escapado para salvarse del humo de las ciudades y ya regresan con los zorritos, ositos, búhos, águilas peladas y peludas y los pájaros carpinteros.
¿Es verdad que el clima esta mejorando? ¿Sera este verano más caliente que guatero de diablo y va a nevar en julio? ¿Como se van a hacer las paradas, desfiles y festivales al aire libre?
Para no aburrirla con tanta cosa quiero entrar al tema del Dia de la Madre.
Mi esposo que se dice descendiente directo de peninsulares ha sido siempre bastante duro y poco expresivo para regalar. Es cierto que trabaja mucho demasiado en un lugar de Bridgeport donde venden pan sobado y sin sobar y otros apodado “mana” porque se le conoce como “pan del cielo.” Usualmente y de malas ganas me regala flores para mi cumpleaños, aniversario de bodas y el Dia de las Madres.Rodrigo me dice que si me regalara flores todos los meses ya no seria una sorpresa. ¿Capta usted lo que le digo? ¿No esto mezquindad, sordidez y egoísmo hacia quien le lava la ropa, mal genio y soporta sus ronquidos nocturnos además de los tóxicos? ¡Oh, Dios!
Yo no le exijo demasiado porque trabajo, me compro mis cosas, tengo anillos y collares que no son baratijas de esas que venden en los mercados y por lo tanto me había acostumbrado al menos a esos gestos simbólicos y sintéticos.
Rodrigo, es también tacaño en cosas de caricias, abrazos y lo demás, pero como le digo, nosotras a todo nos tenemos que acostumbrar porque están los hijos, pero si Rodrigo soba la masa del pan sobado; ¿porque no me soba a mí también un poquito?
Con Lelo que me cortejaba y pretendía cuando estábamos en la secundaria, hemos reanudado la amistad en el hospital donde trabajo y con este jevo encuentro al menos el calol emocional de los cuales el tacaño me ha privado. ¿Usted me entiende?
Es que la forma en que se porta mi esposo que dice que su abuela era de las Canarias ya me tenía deprimida. Para este pasado Dia de la Madre, Rodrigo a quien mal rayo parta estaba feliz porque estaban los restaurantes más cerrados que una almeja por lo cual el miserable dijo que habíamos ahorrado. Lo que me ha puesto muy enfogonada fue el caso de que al menos esperaba flores legitimas y no de funerarias, y algún detallito más.
Por la mañana de este pasado domingo, este sórdido miserable me había preparado un desayuno con una variedad de panes que amasan donde él trabaja. Menos mal que no eran las sobras del sábado. Había preparado un café colado y tortillas españolas hechas por mis nenas que ya están crecidas y se están comiendo un cable porque no habrá graduaciones ni pueden ver a sus amigas y una de ellas al novio.
Pero mire usted como se bate el cobre. En un momento dado durante el desayuno, este infeliz se para y me presenta unas flores artificiales diciendo que por lo de la corona no se atrevió a comprarme las flores que yo merecía, mencionando orquídeas, leyendo después un poema más soso que pan si levadura.
Como a mí me gusta leer novelas románticas de esas donde los protagonistas salen vestidos en la portada a todo color con túnicas transparentes y tienen títulos tales como “Calatos a la sombra de un palmar,” “Posesión carnal en la cocina,” o “El lecho en llamas de Mabel;” esperaba que este tipo me regalara algunos títulos nuevos publicados en Santo Domingo tales como “La vil puñalada de carne de Tiburcio el desenmascarado,” o “Corre, corre pilluela y no te escondas debajo del matre ni me des la esparda,” pero me entrego un paquete mal envuelto que traía varias novelas rosas que se notaban eran de segunda mano.
Allí me he empantalonado por no usar la otra palabra que no puedo utilizar debido a que soy una dama, le he lanzado a Rodrigo la pintura fatula por la cabeza y las novelas usadas las puse en el zafacón. El tipo se enfogona y me dice que yo no le entendía y era injusta porque su misión en el hogar era ahorrar para el futuro y trabajaba más duro que un martillo, lo cual debo reconocer es muy cierto.
“Además, las flores naturales de Colombia pueden venir contaminadas,” me dijo como explicación. Sali de la casa hacia el parque, llame al Lelo por el celular y me desahogue con tranquilidad en su pecho peludo porque la mujer andaba en Nueva York visitando a su abuelita Juana.
Ahora tía estoy en una especie de triangulo y deseo que me diga como resuelvo este paquete.Por favor respóndame los antes posible y que sea antes del Dia del Padre porque debo tomar una resolución definitiva y drástica.
Saludos para usted y los muchachos de este semanario que nos ilumina en el medio de estas crisis que nos obligan a usar mascaras.
Candela
Respuesta,
Querida Candela.
Cualquier persona sin ser experta, versada y perita en las peculiaridades intrínsecas de la naturaleza humana, se puede dar cuenta de que hay en tu situación tres problemas complejos y enmarañados.
El primer asunto se inicia cuando los enamorados no se han conocido bastante antes de contraer los vínculos matrimoniales y por eso les digo y repito a las nenas lo siguiente: antes de maltrimoniarse por las dos leyes, deben conocer muy bien el alma, tendencias, costumbres y hábitos de la otra persona.
¿No te diste cuenta Carmela cuando estaban en esta fase de ilusionismo y artificio llamado noviazgo que Rodrigo era un hombre sumamente ahorrativo y amarrete?¿No captaste que en vez de invitarte al cine te sacaba solamente a pasear al parque para mirar las nubes?Pero también se entiende que la pasión desenfrenada impide a las parejas hacer un análisis objetivo y claro de donde están parados y de lo que pueden esperan y no esperar de la otra media naranja.
Este primer asunto es una de las patas de la mesa, pero como decía mi tío Constancio, “no vale la pena llorar ahora sobre la leche derramada.”
El segundo embrollo de acuerdo a los consejeros en cuestiones matrimoniales es que muchas personas llegan en busca de ayuda y de orientación cuando una relación matrimonial es ya un volcán de odios, malos entendidos, disputas, rencores, reyertas, grescas, trifulcas y pendencias y como decía Popeye el marino, lo que hay ahora en tu matrimonio es un nudo ciego en el mástil de trinquete difícil de desamarrar, y las posibilidades de una separación terapéutica o del divorcio parecen las únicas salidas al hecho que tiene que ver también con el lecho.
Finalmente, la tercera cuestión, es esta relación tan intensa que tienes con el Lelo en la cual buscas apoyo emocional. Tipos como estos andan buscando oportunidades para yacer con mujeres desesperadas y al borde de un quiebre emocional. Este puntal sentimental te lo entregan, pero no es gratis y viene con apéndice. ¿Es que estas tratando de desahogar tu enojo con tu esposo en brazos del Lelo? Mija, No es una buena idea.
Candela, Lelo es un tipo casado que no respeta a su mujer y estadísticamente hablando estas aventurillas o mega aventuras pasionales y extramaritales no van para ningún lado, duran muy poco y usualmente una de las partes involucradas en el rollo se harta de amores escondidos y clandestinos en moteles en el Berlin Turnpike donde según me han contado (a mí no me consta), no cambian ni las sabanas. Por otro lado, la victima de estas aventuras y la frívola apariencia de un amor eterno se queda solo o sola frustrado o frustrada imaginando pajaritos preñados y transformada o transformado en un instrumento esporádico y ocasional de placer sin metas.
Por ahora te recomendaría que hagas una lista de las cosas que tu esposo Rodrigo no te proporciona y las que te proporciona porque el hombre se faja duro en la panadería y estará más cansado que caballo de bandolero. Si todavía lo respetas, habla con el en un parque de la ciudad y dile como te sientes. Como esto no es necesariamente seguro, invítalo a unas sesiones de consejería matrimonial que ahora se ofrecen para mayor comodidad vía telefónica debido a las circunstancias.
Te dejo finalmente con el sabio pensamiento del filósofo barranqueño Torcuato Espinoza cuya receta de la felicidad era “no dejes para mañana lo que debes hacer hoy y al que madruga el Señor le ayuda, pero a veces no por madrugar amanece más temprano.”
Tu tía que vela por ti desde la distancia.
Julia
Comentario a los Consejos de la tía Julia
En mi caso el encierro obligado y la limitación de mis movimientos causadas por el coronavirus, afecta mi libertad individual estipulada por la Constitución de los Estados Unidos. Quiero salir a la playa sin mascara y disfrutar se fiestas y revolú. Si me quiero suicidar es cosa mía. He dicho. Fabian de New London.