Protestas por no reincorporar al trabajo a antiguos empleados de McDonald’s
Trabajadores de McDonald’s y Taco Bell protestan por falta de protocolos sanitarios, desinfección y por no reintegrar a varios de los antiguos empleados que laboraron antes de que se desate el COVID-19 en represalia a que eran parte del sindicato de trabajadores 32BJ.
El jueves, en una de las paradas de descanso más concurridas del país durante el desayuno entre las 7:00AM a 9:00AM, los empleados negros y latinos de los restaurantes McDonald’s y Taco Bell de la parada de descanso North Service Plaza (Northbound), ubicada en la carretera I-95 entre las salidas 12 y 13, dejaron por un momento el trabajo para protestar por el maltrato sistémico, la falta de protocolos de salud, desinfección de los restaurantes y la no convocatoria a trabajar a varios empleados.
Durante ese par de horas los trabajadores de la plaza de servicio I-95 de Darien Northbound exigieron públicamente que McDonald’s ponga fin a una serie de abusos que socavan su bienestar y amenazan la salud y la seguridad de los trabajadores y el público por igual; apoyados por la senadora estatal Julie Kushner, copresidenta del Comité de Trabajo; Representante estatal Matt Blumenthal, Alok Bhatt, Coordinador de la Alianza de Derechos de los Inmigrantes de Connecticut (CIRA) y simpatizantes del sindicato 32BJ.
Los trabajadores testificaron que no han visto evidencia de que la compañía haya realizado una desinfección especial después de que un trabajador contrajo COVID-19 (al menos dos trabajadores del restaurante dieron positivo).
Se han presentado quejas ante la OSHA y las agencias de salud locales que describen la falta de desinfección, la falta de información a los trabajadores de su compañero de trabajo enfermo, la falta de proporcionar el EPP adecuado y la falta de capacitación adecuada de los trabajadores en los procedimientos de seguridad.
McDonald’s ha comenzado a contratar nuevos trabajadores a medida que comienza la reapertura, pero no ha llamado a siete trabajadores de larga data que fueron despedidos en la pandemia. Estos trabajadores experimentados y dedicados han sido durante mucho tiempo uno de los más ruidosos sobre los abusos de McDonald’s.
Los trabajadores continúan trabajando sin recibir ni el salario estándar ni ningún beneficio significativo, incluido el tiempo de enfermedad pagado. Los salarios perdidos han dejado a algunos trabajadores sin la capacidad de pagar comida y vivienda.
A las 9 a.m., los trabajadores y los funcionarios electos se reunieron para denunciar la hipocresía de estos abusos. La corporación de McDonald’s ha gastado dinero para enviar mensajes de apoyo a Black Lives Matter, al tiempo que abusa de los trabajadores de color en esta y otras tiendas. Los trabajadores de Taco Bell se solidarizarán con los trabajadores de McDonald’s y testificarán que los abusos de pago y beneficios son sistemáticos en todos los negocios de plazas de servicio.
“Los abusos que enfrentan estos trabajadores en este McDonald’s se están replicando en otras tiendas y en otras plazas de servicio en la I-95 en Connecticut”, dijo Juan Hernández, vicepresidente de 32BJ SEIU, que ha estado ayudando a los trabajadores a organizarse desde el año pasado.
“Por eso exigimos que la agencia contratada por el estado cumpla con su deber. El Servicio de Recursos Humanos no debe permitir que este maltrato continúe. La falta de salarios y beneficios adecuados, la negativa a traer de vuelta a los trabajadores de toda la vida, y la falta de abordar adecuadamente la pandemia de COVID todos socavan los medios de vida de los trabajadores, y amenazan la salud y la seguridad de todos los que visitan las plazas de servicio”.
Con 175.000 miembros en once estados y Washington D.C., incluidos 5.000 miembros en Connecticut, 32BJ SEIU es el sindicato de trabajadores de servicios de propiedad más grande del país.
Alberto Hernández, supervisor del Sindicato de trabajadores 32BJ, precisó que se han iniciado todos los procedimientos ante el Departamento de Trabajo con el fin de que sean devueltos a sus puestos de trabajo a los siete trabajadores que NO fueron convocados después de que el Gobernador Lamont diera el visto bueno para que se reabrieran los negocios. El sindicato asume que los trabajadores no han sido llamados a sus trabajos debido a que son parte de la sindical y están luchando por sus derechos.
La 32BJ, aspira a que, con todas estas marchas y encuentros públicos con el apoyo de los oficiales electos, bajo todas las medidas de seguridad, se reconozca a los trabajadores de comida rápida ubicadas en los paraderos de descanso de las carreteras, como trabajadores del Estado, es decir, que obtengan salarios y beneficios de salud, vacaciones y días de enfermedad, acorde a esta categoría, puesto que los edificios donde se ubican estos negocios son de propiedad del Estado.
Hernández también afirmó que la Sindical 32BJ hizo las denuncias respectivas a OSHA, debido a que los trabajadores no han recibido el suficiente entrenamiento sobre los protocolos de salud ni tampoco ninguno de ellos han sido testigos de la sanatización rigurosa de los restaurantes de McDonald’s, luego de que dos de los trabajadores resultaran positivo con COVID-19.